Como bien sabes, el gas ha llegado a las estrellas. Pero, ¿cómo ahorramos? Existe un método milenario de las abuelas que te ayudará a dejar de pagar cantidades absurdas en las facturas de luz y gas. ¿Quieres saber cómo? Es un método que pocas personas conocen: veamos cómo hacerlo.
La gasolina se disparó y para contrarrestar este loco aumento de los precios, las familias italianas siempre están buscando nuevas formas de ahorrar. Pero en realidad bastaría compararnos con las personas más sabias, los ancianos. Ellos podrán asesorarte y darte consejos útiles e innovadores para ayudarme a ahorrar dinero en tiempos difíciles como estos: averigüemos cómo hacerlo.
Facturas de gas en aumento

Pero, ¿cómo podemos ahorrar? En primer lugar, es necesario conocer las principales fuentes de consumo de gas en una vivienda. Por ejemplo, mantener encendido un solo quemador de gas durante una hora cuesta más de 1 euro. Entonces, ¿cómo podemos ahorrar un 80%? Para ayudarnos, debemos recordar el remedio de una vieja abuela: averigüemos más.
Gas, cómo ahorrar: el remedio de la abuela vieja
Como ya hemos adelantado, una de las mayores fuentes de consumo es la cocina. Entonces, ¿cómo podemos hacer? la solución sería una caja de cocción. Es una caja de 35x50x40 cm y tiene un hueco central donde se colocará la sartén o cazo.
Como “combustible” utilizará lana, heno o paja, por lo que no se utiliza energía externa. Es un método muy antiguo que usaban nuestras abuelas en el pasado, de hecho, para ahorrar dinero lo usaron durante la crisis económica de 1929.

Pero, ¿cómo se usa? Después de que la comida haya comenzado a hervir en la llama, habrá que verterla en la olla de la caja, la cual deberá cerrarse inmediatamente con una tapa para conservar el calor acumulado anteriormente. Si empiezas a poner en práctica este método de inmediato, ahorrarás hasta un 80% en tu factura del gas .
Una solución realmente ventajosa, dado que la comida permanecerá caliente durante al menos 9-10 horas y se cocinará lentamente. Gastarás menos dinero y tu comida no perderá el sabor. Podrás cocinar sin renunciar al sabor ni a tu dieta, de hecho, es excelente para legumbres u otros platos calientes con tiempos de cocción más largos. Un resultado verdaderamente sorprendente, no podrás prescindir de él.