El agua es un elemento vital para cuidar las plantas de interior y favorecer su buen crecimiento. Para ello, es importante regarlas. Sin embargo, el riego excesivo puede hacer que las plantas se pudran. No todos tienen las mismas necesidades de agua. Mientras que algunas plantas requieren mucha agua, otras prefieren riegos espaciados. Consulte este consejo de jardinería para averiguar si su planta necesita agua.

Antes de regar una planta, es importante comprobar primero si necesita agua o no. Esto te permitirá evitar el riego excesivo que podría ahogar las raíces y hacer que la planta se pudra. Para ello, existe un truco muy práctico que te permitirá regar con éxito tus plantas de interior.

¿Cómo saber si la planta necesita agua?

plantas verdes de interior

Plantas verdes de interior – Fuente: spm

Para saber si el suelo está seco o necesita riego,  solo use un palo.  Tome uno y empújelo varios centímetros en el suelo,  asegurándose de no tocar las raíces,  luego retírelo. Si lo encuentra seco, eso significa que necesita regar su planta. Si por el contrario notas pedazos de tierra adheridos al palo,  significa que la tierra aún está húmeda  y que es inútil regarla.

Cuáles son los otros consejos para saber si la planta necesita agua

Además del truco del palo, existen otros medios y son efectivos para saber si debes regar tu planta o no.

  • Comprueba el color de la tierra de tu planta

Echando un vistazo a la tierra para macetas de tu planta, puedes reconocer fácilmente si tu planta necesita riego. De hecho,  el suelo húmedo es más oscuro que el suelo seco.  Si la tierra de tu planta es de color marrón claro, significa que está seca. Ten en cuenta que este truco es especialmente adecuado para plantas a las que les gusta la humedad  y necesitan un suelo permanentemente húmedo,  como los helechos. Si usa este truco  para suculentas  que toleran la sequía, como los cactus, corre el riesgo de regarlas en exceso. De hecho, la tierra puede parecer seca en la superficie, pero el fondo de la maceta aún puede estar húmedo. En este caso, de nada te servirá regar tu suculenta.

Riego de una sansevieria

Riego de una sansevieria – Fuente: spm

  • Empuje su dedo en el suelo de la planta

Dado que la tierra puede estar seca en la superficie pero húmeda en la profundidad, es recomendable  introducir el dedo en la tierra, hasta 4 cm de profundidad. Si el suelo está completamente seco, incluso en profundidad, riega tu planta. Ten en cuenta que esta técnica es especialmente efectiva para macetas pequeñas, que no son muy profundas. Tenga cuidado al empujar el dedo  para no dañar las raíces. 

  • Levantar la maceta

Si al levantar tu maceta notas  que pesa más de lo habitual,  significa que aún está llena de agua. Si es ligero, significa que el suelo se ha secado y necesitas regar tu planta. Para macetas más grandes,  simplemente inclínelas para estimar su peso.

  • Comprobar el estado del follaje de la planta.

Para determinar las necesidades de una planta, es importante permanecer atento al estado de su follaje. Si notas que las hojas están caídas y el tallo seco,  significa que a tu planta le falta agua. En este caso, riégala ligeramente,  sin tener una mano demasiado pesada,  para que tu planta verde vuelva a funcionar.  Si, por otro lado, las hojas de su planta están flojas y la base del tallo comienza a ponerse marrón y floja, eso significa que  la planta ha sido regada en exceso.  En este caso, es recomendable dejar secar el sustrato, antes de volver a regar.

Además de estos consejos, ten en cuenta que el riego de las plantas también depende de las estaciones. De hecho, en otoño e invierno, el riego se vuelve menos frecuente y, por una buena razón,  la planta entra en un período de latencia. Por lo tanto, necesita menos agua. También tenga en cuenta que la calefacción seca el aire interior. Para mantener su planta hidratada, puede rociar el follaje.

Hilvanar plantas de interior

Hilvanar plantas de interior – Fuente: spm

Además, la mejor manera de regar tu planta es regarla. Para ello, retira el platillo o la maceta y sumerge la maceta en un recipiente con agua durante unos minutos,  para que la tierra tenga tiempo de absorber el agua. Luego vacía el recipiente y deja que tu maceta se escurra y evacúe el exceso de agua. Ten en cuenta que lo mejor es regar tus plantas  con agua no calcárea,  como agua de manantial  y a temperatura ambiente.

Gracias a estos consejos, podrá reconocer fácilmente si su planta necesita ser regada, para evitar el exceso de agua que conduce al marchitamiento de su planta y la pudrición de las raíces.