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¿Por qué hay que añadir sal al agua de lavado de suelos? El truco de las amas de casa experimentadas.

En la cocina, la sal se utiliza principalmente para sazonar los platos. Este ingrediente, cuyo abuso está contraindicado en preparaciones culinarias, también puede ser un gran aliado para la limpieza. 100% natural, este ingrediente reemplaza a la perfección ciertos productos químicos, como el bicarbonato de sodio o el vinagre blanco. ¡Solo mézclalo con agua para un efecto espectacular!

Hay varias formas de usar la sal. Además de su uso en la cocina, este ingrediente natural resulta ser un excelente limpiador. Diluye una buena dosis en agua y déjate sorprender por su increíble acción. Para utilizarlo como producto de limpieza, es recomendable hacer primero un repaso a sus múltiples propiedades.

¿Cómo utilizar la sal para limpiar el suelo?

De hecho, la sal puede resolver muchos problemas domésticos. Es por esta razón que a menudo se usa en lugar de ciertos productos para el hogar, que a menudo son dañinos.

  • La sal es un gran limpiador.

Sal gruesa

Sal gruesa. fuente: spm

Cuando no tengas  a mano una solución natural  como vinagre o bicarbonato de sodio, siempre puedes  combinar  sal  y agua  para  descalcificar  grifos, eliminar malos olores y destapar fregaderos.  Para hacer esto, hierva 2 litros de agua y luego agregue sal gruesa. Verter la mezcla en el fregadero y dejar actuar unos minutos. Luego enjuague las tuberías. Para una acción en profundidad, añade vinagre blanco a esta solución. También es posible verter sal gruesa directamente sobre las superficies, dejar actuar antes de frotar con una esponja.

  • La sal es un desinfectante natural.

sal y limon

Sal y limón. fuente: spm

Además de sus propiedades limpiadoras y desengrasantes,  la sal es un ingrediente fundamental para eliminar las bacterias y el moho presentes en las superficies.  Para ello, basta con verter media taza de sal fina en un balde lleno de agua caliente. Usando un trapeador, limpie su piso. Así,  tus superficies de madera o tus azulejos  recuperarán todo su brillo. Para mayor eficacia, no dudes en añadir jugo de limón a tu agua salada.

Otras formas de usar la sal durante la limpieza

Además de sus propiedades limpiadoras y desinfectantes, la sal es un formidable aliado contra la cal y las manchas de grasa. Es una solución versátil contra las molestias domésticas más comunes. Aquí hay algunos usos prácticos.

  • Sal para eliminar las manchas difíciles

sal en una mancha

Sal en una mancha. fuente: spm

Para eliminar las manchas difíciles, la sal es imprescindible. Se puede utilizar en diferentes textiles: ropa, alfombras, tapicería, pero también en múltiples superficies. Sobre una mancha de grasa basta con echar una buena dosis de sal. Dejar actuar unas horas antes de frotar con un jabón seco de Marsella. Luego coloca tu textil en la máquina para un resultado impecable. Para manchas de óxido en las juntas de sus inodoros y similares, rocíe el área afectada con sal gruesa antes de verter una taza de jugo de limón sobre ella. Dejar actuar unas horas antes de frotar con una esponja y aclarar. Haz lo mismo con  las manchas de vino o de humedad. 

  • Sal para limpiar lunas y espejos

limpieza de ventanas

Limpieza de ventanas. fuente: spm

Las ventanas y los espejos de la casa pueden ser difíciles de limpiar a diario. A menudo, quedan algunos rastros a pesar de una limpieza a fondo. Para ventanas limpias y claras, siéntete libre de usar agua salada. Para hacer esto, vierta una taza de vinagre blanco y una taza de sal en un recipiente con agua. Mezclar y luego pulverizar la solución obtenida sobre la superficie del vidrio y dejar actuar media hora antes de enjuagar. Con un paño suave o una escobilla de goma especial, limpie las ventanas. Al hacerlo, las ventanas de la casa recuperan rápidamente su brillo.

  • Sal para limpiar esponjas

esponja sucia

Esponja sucia. fuente: spm

Para evitar ciertos inconvenientes domésticos, es posible utilizar sal para limpiar  elementos de limpieza, en particular esponjas  o paños de cocina. Para ello, sumerge la esponja sucia en agua con sal y déjala actuar toda la noche. Luego enjuague su esponja con agua limpia. Así eliminas microbios y bacterias y prolongas la vida de tu esponja.

Mezclada con agua, la sal puede ser muy eficaz para limpiar y desinfectar cualquier tipo de superficie. Su cara abrasiva permite limpiar, desengrasar y eliminar ciertas manchas difíciles. ¡Luego se puede usar solo o junto con otros ingredientes para obtener resultados óptimos!